Los niños pueden ser víctimas del estrés o ansiedad y es necesario brindarles asistencia para solucionar cualquier problema mediante estrategias saludables. En este artículo te enseñaremos a cómo ayudar a un niño con estrés.
A pesar de que el estrés está asociado a eventos negativos en nuestras vidas, también puede desarrollarse como mecanismo ante fechas importantes (positivas) como graduaciones, evaluaciones, vacaciones o actividades nuevas, en especial si estas requieren que el niño interactúe con un nuevo grupo social.
En otras palabras, el estrés funciona como una señal de alerta, de que algo viene, sea malo o bueno. Sin embargo, esto no significa que debemos dejar ser al estrés, más bien hay que buscar formas de lidiar con él para que su impacto no impida desarrollar una vida sana.
Lo primero que necesitamos saber, como padres, maestros o representantes en general para ayudar a un niño con estrés, es identificar las señales de que el estrés está allí.
Señales de que un niño está estresado
Dependiendo de la edad que posea el niño, el estrés podrá identificarse de distintas maneras, según la UNICEF.
Niños de 0 a 3 años de edad
Las señales de que un niño de 0 a 3 años está pasando por un episodio de estrés son los siguientes:
- Mayor apego a sus cuidadores
- Regresión del comportamiento
- Temor o miedo intenso
- Propenso a irritarse con facilidad
- Aumento de la hiperactividad
- Cambia en hábitos
- Llora o se enoja con más frecuencia

Niños de 4 a 6 años de edad
A medida que los niños crecen, van mostrando otras señales de estrés acorde a su crecimiento. Lo que hace que sea más fácil identificar este mecanismo.
- Mayor apego a sus representantes
- Dificultad para concentrarse
- Mucha más o mucha menos energía
- Pierde interés por jugar
- Regresión del comportamiento
- Temor o miedo intenso
- Propenso a irritarse con facilidad
- Aumento de la hiperactividad
- Cambia en hábitos
- Busca asumir el papel de los adultos
- Aumenta su ansiedad
Niños de 7 a 12 años de edad
Entre los 7 y 12 años es más común ver episodios de estrés conforme los niños van comprendiendo más sus responsabilidades. Además, están entrando a la pubertad, un episodio complejo y lleno de ansiedad.
Entre las alertas que saltaran a la vista en caso de estrés se encuentran:
- Retraimiento
- Preocupación por personas afectadas en un evento específico
- Mayor irritabilidad
- Agresividad
- Temores excesivos e incontrolables
- Cambios en hábitos de alimentación y/o del sueño
- Deterioro de la memoria o concentración
- Síntomas psicosomáticos o físicos
- Evoca un suceso específico con frecuencia
- Prefiere dedicarse a una misma actividad repetitiva
- Culpabilidad
¿Cómo ayudar a un niño con estrés siendo como padres?
Si notas que tu hijo posee varios o todos los síntomas anteriores, es probable que esté pasando por un momento estresante. Estas son algunas de las cosas que puedes hacer para ayudarlo:
- Haz que tus hijos se sientan seguros y amados: Una forma de relajar a un niño es mostrándole con palabras y acciones lo mucho que lo quieres, aprecias y que lo cuidas. Hazle saber que, cualquier cosa que ocurra estarás para él o ella. Es necesario mantener una comunicación constante y sana con tu pequeño. Pero además de esto, debes ofrecerle una rutina que puedan seguir para que tengan un ritmo sano.
- Enséñalo a afrontar situaciones: Enséñales a tus hijos habilidades que puede desarrollar para que se defienda en momentos de estrés. Hacer ejercicios de respiración, meditar o distraerse con algo que les apasiona, sin evadir responsabilidades.
- Preséntale nuevas actividades: Pintar, dibujar, cantar, pasar el tiempo al aire libre, leer, pasar tiempo juntos, jugar con sus amigos, todas estas pequeñas actividades que los niños deberían hacer con regularidad, ayudan a que su cabeza se libere por un momento de tanto estrés.
- Ayúdate de aplicaciones: En caso de que tu niño tenga un episodio de estrés, puede usar iSharing para comunicarse directamente contigo por un chat cifrado o enviarte una alerta SOS con su ubicación para que puedas ir hacia él.

Ayudar a un niño con estrés es fácil si se pone empeño, dedicación y mucho amor.
¿Todo estrés es malo?
No todo el estrés es malo, este mecanismo puede hacer que los niños busquen desafiarse a sí mismos. Cumplir una meta o resolver un problema si esto es lo que les causa dicho estrés.
Lo anterior no significa que si tu hijo tiene estrés hay que dejarlo ser, primero hay que identificar la causa del estrés. Si es positiva, negativa o si viene un evento traumático, el conocido estrés post-traumático.
En caso de que su hijo o niño cercano esté pasando por estrés post-traumático, es necesario que sea abordado por un profesional de psicología.